La elección de Arabia Saudita como sede del Mundial 2034 exige construir o renovar al menos 15 estadios, incluidos proyectos como el Estadio Aramco en Al Khobar y un recinto en altura en NEOM. Esto ocurre mientras se reportan retrasos, abusos laborales y fallos de seguridad. Human Rights Watch documentó casi 50 muertes de trabajadores migrantes en 2025 debido a caídas, electrocuciones y decapitaciones.
Estos problemas reflejan el patrón del Mundial de Catar 2022, donde murieron más de 6.500 migrantes bajo el sistema kafala. Organizaciones como Amnistía Internacional alertan que sin garantías reales, los preparativos saudíes podrían generar abusos masivos y justificar llamados al boicot.
Desafíos en la construcción de estadios
Arabia Saudita planea 11 estadios nuevos y la renovación de cuatro para 2034, incluido el gigantesco estadio de NEOM integrado en The Line. Sin embargo, enfrenta retrasos por interrupciones de suministros, escasez de trabajadores y calor extremo. Los proyectos de Riad, Yeda y Dammam ya han sobrepasado plazos, repitiendo los problemas de Catar.
FIFA flexibilizó sus requisitos en 2023, permitiendo depender de construcciones no probadas. El Estadio Aramco, con 74 grúas, sufre recortes presupuestarios que reducen medidas de seguridad.
Explotación de trabajadores migrantes
Más de 10 millones de trabajadores migrantes, en su mayoría de Asia del Sur y África, sostienen las obras del Mundial. Muchos trabajan 10–12 horas diarias bajo 45°C por menos de 2 libras por hora. El sistema kafala los ata a los empleadores y HRW registra muertes evitables por falta de arneses y medidas básicas. NEOM ha sido vinculado también a desalojos forzosos del pueblo Huwaitat.
A diferencia de Catar, Arabia Saudita no ha firmado acuerdos obligatorios de salarios o seguros, dejando a las familias sin compensación.
Violaciones de seguridad y muertes
Los sitios de construcción registran casos graves como decapitaciones y electrocuciones, sin investigación adecuada. Con 13 estadios de 40.000 plazas y trabajos masivos en el desierto, los riesgos podrían superar los de Catar. Las evaluaciones de FIFA ignoraron los datos de seguridad.
Riesgos ambientales y climáticos
Las obras contradicen las promesas climáticas de la FIFA: uso masivo de hormigón en el desierto, temperaturas de hasta 50°C y consumo energético descontrolado similar al de Catar.
Presiones financieras y logísticas
La inversión de más de 200 mil millones de dólares presiona los presupuestos de sectores clave. El plazo de 25 días para candidaturas impidió la revisión adecuada. Los retrasos podrían afectar proyectos clave de Visión 2030.
Paralelos con los abusos de Catar 2022
Arabia Saudita reproduce el sistema kafala, las temperaturas extremas y la represión. Organizaciones critican una estrategia de sportswashing financiada por el petróleo.
Llamados al boicot y reformas
Amnistía Internacional, HRW y 21 organizaciones más calificaron la elección saudí como un “momento de gran peligro”. Exigen reformas profundas: abolición del kafala, salarios mínimos, sindicatos y garantías de seguridad.
Noruega fue la única federación que votó en contra. Demandas legales en 2025 acusan a FIFA de ignorar sus propias normas. Activistas como Lina Alhathloul denuncian que las comunidades afectadas —incluidos los Huwaitat desplazados— no fueron escuchadas.
Tensiones del programa Visión 2030
Los retrasos, muertes, explotación y riesgos climáticos demuestran falta de preparación. Como en Catar, crecen los llamados al boicot para exigir responsabilidad y proteger vidas.