En un desafío dramático a la integridad y el compromiso de la FIFA con los derechos humanos, un grupo de destacados abogados internacionales ha presentado formalmente una denuncia contra el organismo rector del fútbol mundial por no estar a la altura de sus ideales al adjudicar la Copa Mundial de la FIFA 2034 a Arabia Saudita. Publicada en el sitio oficial de denuncias de la FIFA, esta queja surge en medio de una creciente indignación internacional por el historial documentado de violaciones a los derechos humanos del Reino. La denuncia de 30 páginas advierte que la FIFA está permitiendo que “acuerdos políticos y beneficios eclipsen la rendición de cuentas y la dignidad humana básica”. Veamos en detalle:
Expertos legales demandan a la FIFA con una denuncia de 30 páginas
La presentación fue realizada por Mark Pieth, Stefan Wehrenberg y Rodney Dixon, todos abogados calificados con experiencia en anticorrupción, derecho internacional y derechos humanos. La denuncia fue presentada mediante el sistema interno de quejas basado en la web de la FIFA, en un intento formal e histórico de hacer que la organización rinda cuentas a sus propios estándares.
“El silencio ensordecedor de la FIFA ante nuestras solicitudes para garantizar el cumplimiento de los derechos humanos internacionales fue clamoroso”, escribió el abogado suizo Stefan Wehrenberg. “Al aceptar sin cuestionamientos la candidatura de Arabia Saudita, la FIFA no solo ha cerrado los ojos ante las preocupaciones por los derechos humanos, sino que las ha silenciado”.
Una candidatura sin competencia genera sospechas
En diciembre de 2023, Arabia Saudita fue declarada oficialmente sede del Mundial 2034 por aclamación, sin que hubiera una candidatura competidora. Esta decisión ha sido ampliamente criticada por ser secreta y antidemocrática.
“Una candidatura que pasa sin oposición en un país con tal historial de derechos humanos no es un accidente, es un fallo del proceso”, afirmó el abogado británico de derechos humanos Rodney Dixon. “La FIFA debe explicarnos cómo puede reclamar respeto por los derechos humanos mientras guarda silencio ante uno de los regímenes más represivos del mundo”.
Historial de derechos humanos en Arabia Saudita: una letanía de abusos
La denuncia detalla un patrón de violaciones sistemáticas en Arabia Saudita que contradicen la política de derechos humanos de la FIFA, entre ellas:
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Restricciones a la libertad de expresión
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Detenciones arbitrarias de activistas, periodistas y críticos
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Discriminación contra mujeres y minorías
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Explotación masiva de trabajadores migrantes
“El historial de Arabia Saudita no está mejorando, está empeorando”, añadió Pieth. “Si la FIFA continúa por este camino, corre el riesgo de convertirse en cómplice de la represión en lugar de ser una fuerza de unidad internacional”.
Human Rights Watch también contribuyó recientemente señalando: “Las autoridades saudíes continúan abusando del sistema kafala, exponiendo a los trabajadores migrantes a la explotación, robo de salarios y abuso físico”.
Negocios como siempre, a pesar de los compromisos políticos
La denuncia formal alega que la FIFA no está haciendo nada para detener estos abusos, y que simplemente sigue con los negocios como de costumbre. “No se está tomando ninguna medida por parte de la FIFA para corregir estas violaciones de cara al Mundial”, indica el documento. “Parece que todo sigue igual, sin intención de cambio alguno”. Los críticos sostienen que el silencio y la inacción de la FIFA no solo perjudican a las víctimas, sino que también alientan a gobiernos autoritarios a usar el deporte como herramienta de lavado de imagen.
Política de Derechos Humanos de la FIFA y acusaciones de hipocresía
La FIFA publicó su Política de Derechos Humanos en 2017, estableciendo que las naciones anfitrionas deben cumplir con prácticas laborales y de derechos humanos globales, basadas en los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos Humanos. Esta política fue aplicada rigurosamente en el Mundial 2026, organizado conjuntamente por EE.UU., México y Canadá, quienes debieron presentar planes sólidos en derechos humanos. ¿Por qué Arabia Saudita no tuvo que cumplir con los mismos estándares?
“La FIFA ha creado normas que se niega a aplicar”, afirmó Wehrenberg. “Eso no es mala gobernanza, es complicidad”.
La visita de Infantino y Trump a Medio Oriente genera sospechas
Días antes del congreso anual de la FIFA, el presidente Gianni Infantino realizó una visita pública a Arabia Saudita junto con el expresidente Donald Trump, lo que levantó cejas. La visita incluyó reuniones de alto nivel y conversaciones que, según informes, se centraron en diplomacia deportiva y colaboración en infraestructura.
Después, Infantino y Trump también se reunieron con líderes en Qatar, anfitrión del Mundial 2022, que enfrentó más de una década de críticas por el trato a los trabajadores migrantes.
Los aficionados vieron estas reuniones como algo más que simbólico. “La reunión de Infantino con líderes políticos de gobiernos represivos es profundamente preocupante”, dijo Minky Worden, de Human Rights Watch. “Genera serias dudas sobre la integridad e independencia de la FIFA”.
¿El programa Visión 2030 de Arabia Saudita: cortina de humo?
Los funcionarios saudíes invocan con frecuencia el programa Visión 2030, una iniciativa para transformar la economía y sociedad saudí como prueba de reforma. Aunque ha habido cambios cosméticos como permitir que las mujeres conduzcan o relajar ciertas prohibiciones de entretenimiento, los críticos sostienen que son solo maquillaje.
“Visión 2030 es más mercadeo que reforma real”, aseguró Dixon. “La represión de activistas, el régimen de vigilancia y los abusos laborales siguen firmemente en pie”.
Arabia Saudita ya está invirtiendo sumas colosales en proyectos de infraestructura para construir nuevos estadios y redes de transporte para el Mundial 2034. La escala promete superar la de Qatar, que costó más de 200 mil millones de dólares y fue duramente criticada internacionalmente.
Respuesta de la FIFA y lo que viene
En una carta reciente a Human Rights Watch, la FIFA reiteró su “fuerte compromiso con la promoción y protección de los derechos humanos en el contexto de sus actividades”. Pero los denunciantes consideran que esta declaración es insuficiente.
“Los lemas sin fuerza legal no valen nada”, declaró Pieth. “Necesitamos transparencia, supervisión y la posibilidad real de sancionar a los anfitriones”.
Los abogados piden que FIFA implemente un modelo basado en cumplimiento para Arabia Saudita, incluyendo supervisión por terceros, reparación para trabajadores perjudicados, y compromisos vinculantes en derechos civiles.
“Aún existe la posibilidad de una reforma genuina, pero solo si la FIFA actúa con decisión y buena fe”,
afirmó Dixon.
Creciente presión global: necesidad urgente de cambio
La denuncia es una de varias presentadas ante el aumento de presión global sobre la FIFA por parte de la sociedad civil, grupos de derechos humanos y medios de comunicación. En una carta abierta enviada hace una semana, más de 20 ONGs exigieron a la FIFA “una política de tolerancia cero contra violaciones de derechos humanos por parte de los países anfitriones del Mundial”. Las ONGs afirman que al otorgar la sede a países con antecedentes cuestionables, la FIFA está avalando una cultura de impunidad y encubrimiento.
Una prueba de integridad para la FIFA
Mientras la FIFA comienza a preparar el Mundial 2034, se encuentra en una encrucijada. ¿Seguirá siendo una organización que habla mucho sobre derechos humanos pero hace poco para defenderlos? ¿O finalmente tomará medidas concretas? La denuncia presentada por Pieth, Wehrenberg y Dixon puede ser una llamada de atención, no solo para el torneo, sino para toda la gobernanza del fútbol mundial.